“La incorporación de la ciudadanía da continuidad a los procesos de transformación urbana”

Alejandro Aravena

Si bien en la actualidad los conceptos que enuncian hábitat y arquitectura nos llevan directamente a delimitar un paisaje urbano, al mismo tiempo, éstos presentan un espacio para el análisis que es abordado profusamente por la cultura visual. Porque cabe recordar que buena parte de estas reflexiones –sobre lo urbano– han sido el resultado de varias discusiones originadas dentro de publicaciones académicas, acciones de arte y proyectos cinematográficos. Es por eso que desde un espacio expositivo, movilizamos y presentamos las hipótesis y texturas de 19 artistas visuales y un colectivo que han trabajado en lugares tan disímiles como por ejemplo Lima en Perú, La Paz en Bolivia, o la austral ciudad de Puerto Montt en Chile. Para estos artífices las perspectivas con las cuales el territorio reacciona, frente a las modificaciones urbanas, nos incita a construir imaginarios y formas de representación de un espacio que por lo general requiere de ideas colectivas.

Cada uno de estos lugares propuestos por los artistas, enfrenta una estética que conecta lo urbano, la inter-urbanidad y la ruralidad con otros lugares que ya han sucumbido ante el progreso desmedido que posee una carga cultural que contiene peculiares estéticas. Es más, si analizo cada rincón de esta exposición, bajo una concepción culturalista, establezco que lo urbano, junto a sus ramificaciones elementales, nos entrega la posibilidad de tipificar algunas propuestas artísticas que han sido formuladas aquí para enfrentar críticamente esta cuestión.

A partir de los espacios que presenta un lugar como M100, he decidido denominar este proyecto como ‘Paralelos Urbanos’, por el simple hecho de comprender que son varias las sociedades que están imbuidas en una delirante neoliberalidad que expande sus modelos de planificación urbana, tergiversando todos los espacios en donde habitualmente interactuamos. Una situación que a estas alturas ya se ha convertido en una política de Estado que altera los paisajes urbanos y que en la actualidad parece ser la principal preocupación de la comunidad, de los arquitectos, urbanistas y por cierto del arte contemporáneo.

Por lo que a raíz de estos cuestionamientos preliminares, surgen ideas que nos permitirían estudiar, desde las obras de artistas, arquitectos y urbanistas, cómo éstos han constituido un espacio urbano frente al de otras ciudades, regiones y países; y además para que esos mismos espacios actúen como un estudio de campo que expande una reflexión de la política estatal de la política estatal de construcción e investigación crítica sobre los ‘paralelos urbanos’.

Es bien conocido que el espacio público ya no es proyectado con los criterios de un espacio colectivo, más bien éste ha sido pensado en términos de aquellos límites que quiere dictaminar el negocio de la construcción y, ciertamente, algunas de las ciudades citadas en ‘Paralelos Urbanos’ ya han colapsado ante la intervención unilateral de las reglas del mercado. Por lo demás, al estar conscientes que el desarrollo de la ciudad debe ser planificado, aunque los intereses económicos implícitos en el suelo urbano impedirían lo contrario, nos indica que una real planificación de la ciudad se produce cuando comprendemos las diferencias entre la representación de un espacio determinado y lo que simbólicamente el Estado y su burocracia pretenden instalar en esos lugares, un imaginario que ha envuelto las narraciones, imágenes e intercambios socio-culturales que estos artistas visuales presentan en este lugar.

Finalmente el espacio urbano, ese que es vivido por sus habitantes, a partir de la experiencia y el diálogo, y en donde la imagen de la ciudad es construida colectivamente, carece de un perfil ciudadano que congregue un sentido y que le entregue un significado a quienes lo habitan. En ese sentido, todos como sociedad hemos olvidado los criterios con los cuales podemos generar una ciudad, su expansión y los nuevos vínculos que afloran ante las necesidades crecientes de una civilidad que visione desde la arquitectura y el urbanismo un plan estratégico que enfrente la desdicha que han generado, en el último tiempo, las nefastas planificaciones urbanas en diferentes lugares del mundo.